Enseres e insignias

PATRIMONIO PROCESIONAL

Enseres e insignias

Altar de insignias
Altar de insignias

Signo evidente y diferencial de la Archicofradía de La O son sus insignias procesionales. Se trata de objetos en los que se materializa, la historia, carácter, idiosincrasia y en definitiva la propia identidad de la corporación. A través de ellas se reconoce de manera inequívoca a la Hermandad, pues aluden a sus títulos, privilegios, las advocaciones a las que rinde culto e incluso a las particularidades específicas que la singularizan. El juego de insignias es por tanto el conjunto de piezas en el que se deposita no sólo un legado material sino también espiritual y simbólico que define la identidad visual y esencial de la corporación. Quien contempla el discurrir del cortejo procesional de la Archicofradía Sacramental de La O, en la tarde del Viernes Santo, no sólo asiste a una procesión en la que se verifica de forma externa el culto a las imágenes de los sagrados titulares. Aparte del testimonio del Evangelio de Cristo, público en lo colectivo y anónimo en lo individual, se asiste a un discurso narrativo en el que se conmemora el misterio de la Redención del género humano a través de la Pasión Muerte y Resurrección del Señor. Un discurso que incluye toda una serie de mensajes insertos en las insignias, que a través de imágenes referenciales y elementos simbólicos transmiten un legado dogmático e histórico materializado en objetos patrimoniales y artísticos.

La Semana Santa de Sevilla ha aquilatado como invariables algunos aspectos de las estaciones penitenciales como traza de la homogeneidad que originalmente se observaba en los cortejos procesionales de los siglos XVI y XVIII. De este modo, existen insignias comunes a todos los cortejos procesionales. De forma alternativa a estos elementos universales, existen otros en los que se sustancia la singularidad específica y característica de cada corporación. De esta forma, el conjunto resultante tiene, por un lado, un fuerte sentido de adscripción al hecho general de la Semana Santa, mientras que simultáneamente, se aporta por otro lado un valor particular y propio. El arte tiene aquí un papel fundamental que ejerce desde dos planos complementarios: la retórica y la estética. En cada una de las insignias, la obra de arte funciona como elemento persuasivo, apelando a la atención de quien contempla, señalando aquellos aspectos de la historia de la corporación o del testimonio evangelio que pretende comunicar y presentar. De forma simultánea, el uso artístico de lo suntuario y la exuberancia ornamental, o la ascética humildad en lo material, ponen de manifiesto a través del plano estético y el lenguaje visual, toda una serie de contenidos narrativos y simbólicos que complementan el mensaje.

Cirial del paso palioEsta cuestión no sólo se verifica durante la Estación de Penitencia, si bien es el momento en que más insignias se contemplan, por lo que el contenido que se ofrece es más denso y rico, adquiriendo una mayor dimensión. El uso de las insignias se produce en cada acto de culto interno o externo de la Archicofradía. Por tanto, la aparición de éstas no es casual ni circunstancial, su uso está siempre determinado conforme a las reglas y ordenanzas. En consecuencia, qué insignias y en qué cantidad, orden y disposición aparecen en los diferentes cortejos o celebraciones en las que intervienen, es algo tiene no sólo una función representativa específica identificando a la corporación de forma colectiva e incluso a quien la porta en el cargo que ostenta, sino que también cualifica el acto que se desarrolla y determina su importancia y protocolo desde un lenguaje visual minuciosamente codificado y aquilatado.

Para una exposición secuencial de los objetos que componen el juego de insignias de la Archicofradía Sacramental de La O y su análisis histórico artístico, parece oportuno emplear el orden con que las ordenanzas de la corporación organizan el cortejo penitencial cada Viernes Santo. No obstante, existen algunas insignias que están en desuso o no figuran en la Estación de Penitencia, por lo que serán ubicadas en el lugar que conceptualmente les correspondería por su importancia y significado.